viernes, 18 de mayo de 2012

POR LA PUERTA GRANDE....


Menudencias 

Lo práctico, lo infinito lo ingenuo. Lo grave. La metodología del biorritmo.
Lo práctico. Lo ingenuo, lo deseado, lo casquivano. Lo lúgubre. La metodología del cuento.
Lo maravilloso. Lo cruél.
Lo que se pisa con el pié descalzo.
La desgracia.

Ceguera voluntaria

Cada día me levanto temprano, desayuno café con leche de soja y tostadas con jamón de pavo o con queso gruyere. Me pongo las noticias, siempre intentando ser consecuente con lo que voy a escuchar y aceptando que este mundo que ahora veo no se parece nada al que yo pensaba que se podría conseguir.
De muy jovencita, acudía una vez por semana al orfelinato de Sta.Teresa, que regentaban unas monjitas muy amables. Allí jugaba con esos niños abandonados y me sentía bien pensando que, de algún modo, contribuía con la sociedad.

También, una vez al mes, acudía junto a dos o tres compañeras más y mi tutora (también monja) a la parte más deprimida y pobre de la ciudad, donde ancianos malvivían sólos, esperando el arroz y la leche que les llevábamos. Así pensaba yo que les hacíamos un poco felices con nuestra compañía. Y me sentía bien pensando que, de algún modo, contribuía para crear un mundo más justo.

Un poquito más mayor, quizá con 14 ó 15, daba clases de ortografía a los gitanillos de la lonja. Me aterraba aquel lugar por su aspecto de fortaleza y por la brutalidad de las relaciones entre sus habitantes. Pero luego me sentía bien pensando que, tal vez, alguno de aquellos niños podría emerger y descubrir ese mundo paralelo que les estaba prohibido, el mundo payo.

De todo aquello sólo quedan estos pobres recuerdos. Porque la realidad, la de ahora, es terriblemente más brutal, insalvable, caótica, obscena. Y hace mucho, mucho tiempo que dejé de ser una buena persona.
Ésto es la madurez: la distancia, la autocompasión, el absentismo, la ceguera voluntaria. Ésto y la rabia.

A propósito del deseo


Soñar no cuenta. Supongo que lo veréis normal. El deseo es sueño, sí, pero sueño de constantes vitales bífidas y despiertas, sueño de mirar y de tocar y de infiltrarse por los recodos, como una ardilla o un ciempiés.
Anoche deseaba que mi mejor amigo me quitara los calcetines. Luego soñaba (soñar no cuenta) que me lamiera los pies y me separara los dedos uno a uno. Luego pensaba que no tengo ningún mejor amigo. El deseo es traicionero, según parece.

Es bueno, gratificante hablar del deseo con los demás. Yo no suelo desear a los que todavía juegan a la oca. Pero reconozco los vientres planos, los ojos multicelulares, las espaldas largas como pistas de aeropuerto. Y, a veces, envidio a los amigos que se atreven con ese nacimiento.

Amémonos. Ámense. Con los jóvenes o con las indolentes, con los mayores que no lo quieren ser y con los que lo son. Dile a la posadolescente que la deseas porque es tu reencarnación. Dile al mayor que te acurruque (porque sabe hacerlo) y masajea suave las curvas de sus sienes.

Deseos. Humanos, plurales, ajenos, soñados, etéreos, épicos.
Yo deseo. ¡Y cuánto!

PILAR MAS CASTILLO (ESCRITOS DE NOVIEMBRE DE 2O10-MARZO DEL 2011)


Te quiero Pilar Mas, mi Lola....Me alegra habértelo dicho a la cara en más de una ocasión..., te beso ahora comos siempre lo hacía...Me hubiera gustado darte el último abrazo, pero tu ya me lo habías dado sin yo saberlo, como siempre adelantándote.... seguiremos abrazándonos de otra manera... Dentro de un rato voy a verte; por fin me dejas verte, después de casi un año..., aunque ya no puedas mirarme con esos ojos brujos, esa energía vital a pesar de todo, ese coraje y esa rebeldía que desprendías cada minuto llena de una sinceridad brutal...Seguirás siempre abanicándome...Siempre...Te quiero, te quiero, te quierooooo...Y hoy me has hecho una putada muy grande amiga..


Gracias por formar parte de mi vida. Nos veremos, nos vemos...




Tu Virgiluna...













------------------------------------------------------------------------------------------------------------

                                                          HASTA SIEMPRE....



domingo, 13 de mayo de 2012

UNA DOXOLOGÍA PROPIA



Da gusto ver nacer y crecer en la música a artistas de la talla del murciano Maez (Pablo Matías) en mi propia ciudad...Ahora, con tan sólo 24 primaveras,  debuta con el álbum "We'll never make it home", producido por Suso Saiz. A Maez lo he visto unas tres veces en directo y no tiene desperdicio. Tiene mucho que decir, que cantar, que tocar... y además lo hace de perlas... Dejo una muestra. Con un poquito más de información AQUÍ



martes, 8 de mayo de 2012

MIL MANERAS....



Dejo por aquí el lírico homenaje que le ha hecho mi amigo David, con quien también he compartido infancias literarias y juventudes literales..., al escritor Maurice Sendak. Yo no lo habría dicho mejor en esta ocasión.



"De mil maneras, con mil y una imágenes se significa la infancia, ese período de tiempo que cobra sentido cuando se ha dejado atrás. Es el árbol de manzanas de oro de los mitos, el huerto de las religiones, la mirada glauca o el prado interminable de los poetas. La infancia es el punto de inflexión de nuestras vidas, también el alma de cualquier memoria. El escritor va en su busca, el artista trata de plasmar su pureza, el moribundo la revive en sus últimos días.

La infancia crece dentro de nosotros con los años, se nutre precisamente de aquello que más nos aleja de ella. A medida que nuestro cuerpo cambia, mientras todo se llena de obstáculos, al tiempo que vamos abriendo pequeños abismos que adquieren la forma de un problema insoluble, de una decepción, de la inevitable caída en la nada de todos los días, ella se vuelve más diáfana, más rotunda, omnipresente en cada esquina de la mirada. Cuando el mundo parezca irse a la mierda, cuando por fin alcancemos esa clarividencia que procura el hábito de la derrota, cuando, al caminar, seamos reconocidos como el hombre o la mujer que los otros –todos esos “otros” que jamás fueron niños– siempre esperaron que fuésemos, ella nos dirá: todo lo que sois creció en vosotros cuando decidisteis abandonarme.

Porque Peter Pan no se equivocaba. La madurez es el producto de una decisión. Que no parezca un acto de voluntad, que creamos que se trata de un axioma de la naturaleza no deja de ser una convención social o una gilipollez metafísica. Todos crecemos porque queremos crecer; todos maduramos porque deseamos parecernos a aquellos gigantes que nos instruían en las leyes de los gigantes. Y cuando nos damos cuenta de ello y pretendemos remediarlo, casi siempre acabamos dejándonos la vida y el sueldo en antidepresivos.

Hoy ha muerto Maurice Sendak, y hoy precisamente se me ha venido toda la infancia encima.

Con él supe dónde vivían los monstruos. Con él fui niño hace ya mucho tiempo. Con él decidí hacerme mayor."



DAVID LÓPEZ SANDOVAL


Silvio Rodriguez: Corazón