domingo, 27 de febrero de 2011

ÚLTIMO ATARDECER...


Mi último atardecer (miércoles 23 de Febrero de 2011). Al menos, el último que capturo con mi alma y el objetivo de mi cámara desde el balcón del que ha sido mi hogar durante los últimos cuatro años. Ahora comienza un nuevo amanecer; nuevas rutas y experiencias; otras soledades necesarias y creativas; mudar de piel y tripascorazón; otros atardeceres... Gracias por este tiempo maravilloso y lleno, sobre todo, de vivencias positivas y lúcidas que me han sanado en gran parte y en el que he registrado, al estilo de Harvey Keitel en Smoke, los colores de su cielo en distintos momentos: una herencia inasible que me conforma aún más. Me ha permitido compartir y celebrar la vida en amistad (gracias a todos/as los que habéis participado conmigo) y también me ha mostrado la muerte y sus panteones. Nada se ha perdido. Todo ha quedado en mí. A través de mis ojos. Ahora toca renacer...



Silvio Rodríguez: ¿A dónde van?


Bolero de Ravel


Michael Nyman: Big My Secret


Elephant Gun: Beirut


Carpenters: My favorite things






SING, SING, SING...

viernes, 4 de febrero de 2011

¡VIVE, VIVE, VIVE...!



Tras concluir su llamada Trilogía del dolor: Amores Perros, 21 gramos y Babel (me falta por ver esta última),  Alejandro González Iñarritu me vuelve a estremecer con Biutiful: es una película dura, sórdida y cruel, pero al mismo tiempo llena de una belleza inefable en cada uno de sus planos y muchos de sus diálogos. Además, da que pensar, nos hace reflexionar acerca de las numerosas realidades humanas que hay a nuestro alrededor, a la vuelta de la esquina, aquellas que todos los días miramos pero no queremos ver. Os la recomiendo fervorosamente, pero os aconsejo que ese día la veáis con el traje de atormentado/a que cada uno/a guarda en su almario para permitir (como muy bien dice el trailer) que la tormenta se apodere de nosotros y nos inunde visual y emocionalmente. Esta película lo merece.Y si no encontráis vuestra miseria y su belleza ese día, no os preocupéis, el film lo hará por vosotros: no seréis los mismos cuando termine. Te pone los pelos de punta y no sólo los que solemos ver adheridos a nuestra piel precisamente.

Me sorprende este director mexicano de nuevo: en esta ocasión se ha desprovisto de su guionista habitual (Guillermo Arriaga) para lanzarse al vacío él solo con Javier Bardem, que está magnífico, casi insuperable. El personaje que encarna Bardem, Uxbal, es un traje hecho a la medida del actor, lo escribió pensando en él, como bien decía el propio Alejandro en una entrevista que pude ver hace dos días en el Canal +; es de agradecer, también, el descubrimiento de la actriz Maricel Álvarez, maravilloso el personaje que encarna y maravillosa su nariz; y la fotografía de Rodrigo Prieto. Sin palabras. Miserable belleza, bella miseria...



En cuanto a la banda sonora, destaco uno de mis conciertos favoritos de Ravel: Concierto para piano en Sol Mayor. Iñarritu elige el 2º mov. de este concierto (concierto in G) Adagio Assai, interpretado por Zoltan Kocsis, con Ivan Fischer como director de orquesta. No he encontrado este concierto en concreto. Nos conformaremos con Bernstein (que no es poco, aunque la calidad de sonido no sea muy buena). Como decía Iñarritu, Ravel era un músico adelantado a su tiempo y muy cercano al jazz en sus partituras, emotivo y entrañable (de entraña). En la entrevista que vi, el director de cine nombra a un poeta, un gran poeta: Jaime Sabines; y recita uno de sus poemas, añadiendo que la esencia del film se podría resumir con estos versos de Sabines:

Del mito


Mi madre me contó que yo lloré en su vientre.
A ella le dijeron: tendrá suerte.


Alguien me habló todos los días de mi vida
al oído, despacio, lentamente.
Me dijo: ¡vive, vive, vive!
Era la muerte.

JAIME SABINES


Ravel: 2º mov. Adagio Assai